Este hogar busca resolver el programa para una vivienda convencional integrada en un enclave histórico y tradicional, pero con nuevas formas constructivas y disposiciones espaciales atrevidas que permiten la relación entre todas las plantas de la vivienda.
A pesar de las proporciones y materialidad tradicionales de los huecos, con persianas metálicas que aportan privacidad, la fachada oculta una vivienda con carácter propio y una materialidad contemporánea que busca la sinceridad constructiva. Es decir, una vivienda donde todo es lo que parece.
La estructura de hormigón y hierro está presente como hilo conductor en todo el edificio (incluidas las zapatas y barandillas de la escalera), y su convivencia con materiales como la piedra caliza en diferentes acabados y madera de fresno convierte la percepción del hierro y el hormigón como si de materiales nobles se tratara, a pesar de su uso habitual.
Así, con estos materiales se ha resuelto gran parte de los acabados, con una fuerte presencia de la madera tanto en las puertas de gran altura como en los revestimientos.
Es precisamente la presencia del hormigón visto lo que ha aportado complejidad al ejecutar las instalaciones de alta eficiencia energética como aerotermia, suelo radiante, climatización con fan coils o ventilación con recuperador de calor. Todo esto, junto con carpinterías exteriores de PVC y un sistema SATE de aislamiento, aporta un alto grado de confort térmico que convierte la vivienda en una casa con un consumo energético casi nulo.
Así, con la riqueza espacial, se desarrolla un programa que consta de plazas de garaje en planta baja y una zona de día en planta primera, con los usos diferenciados según las alturas de losas de suelo y techo, organizándose alrededor de un gran cubo de madera y vinculado a un patio con piscina, que además sirve como foco de iluminación y ventilación para toda la vivienda. Es en este patio donde podemos ver la única huella de las viviendas que existían desde los años 40 en el mismo emplazamiento: un conjunto de azulejos hidráulicos que formaban parte del pavimento de las viviendas anteriores, y que siguen siendo parte de la historia del edificio. El resto del programa se resuelve alrededor de la escalera, y el recorrido vertical junto al gran óculo central donde se encuentran 2 habitaciones individuales, baño, lavandería con terraza de servicio, y estudio. Es en la última planta donde se disponen las piezas habitacionales con mayor privacidad, un vestidor y una habitación tipo suite conectada directamente con su baño.
7 de enero de 2025